Con swing and swing, como su nombre bien indica, partimos de una polisemia, en la que se conjugan el swing como golpe de golf, y el swing como género musical. Estas son las dos facetas laborales que definen a Murdo McCorquodale, golfista y cantante, además de excelente persona.
Como comentábamos anteriormente, la idea que dotaba de originalidad a la marca se basaba en el doble juego de la palabra.
Llevándolo a un símil visual, desarrollamos una mitad de la pelota de golf junto con la otra mitad de la malla metálica de un micrófono. El logotipo se presenta con una tipografía caligráfica, que divide la unión esférica, reforzando más si cabe el concepto que buscamos.
Para nuestro cliente y amigo Murdo, hemos tenido la suerte de poder desarrollar tanto su marca gráfica, sus tarjetas personales y su sitio web en el que se le puede conocer mejor.